El tiempo tiene un poder inefable. Se dice que es un testigo justo de nosotros mismos, como una cosecha que siempre responde a aquello que nosotros hemos ido sembrando. Siembra viento y cosecharás tempestades, muy sonado. Quizás hayas podido coincidir con alguna persona que arrojan en su presente una falta de vitalidad, de ilusión y de entusiasmo, creando su futuro como una réplica de ese estado creativo en el que se alojan. Normalmente, esa disposición anímica, está relacionada con un nexo demasiado denso de conexión entre su pasado y su presente. Patrones de pensamiento, circunstancias y ciclos que continuamente se repiten al vivir en el presente la película del pasado. Pero veamos e indaguemos sólo una vez más… ¿Que es nuestro pasado? ¿Su sombra nos puede estar alejando de crear y vivir la experiencia vital que desearíamos experimentar?

Estudios afirman que el 90% de nuestros recuerdos son inventados. Tu has sido la persona que lo ha creado mediante la interpretación de tu palabra que muy posiblemente estuviese manchada de creencias familiares, sociales o religiosas que ni si quiera eran simétricas a tu más sincera esencia. De esquemas sociales, paradigmas económicos o científicos, religiosos o culturales, políticos y televisivos, que han podido oprimir la intensidad de la autenticidad que incluso hoy, sigue latente en tu interior. Sí, siempre has tenido la certeza de que eras alguien especial. Ellos han podido decidir por ti el pasado que has creado. No los culpes, siempre has sido tu la persona responsable de su vida. Sin embargo, lo mismo que une, separa. Es hora de responsabilizarte. Tu palabra poseída por los paradigmas pudo crear tu pasado. Tu has creado tu pasado desde la inconsciencia, ahora tu puedes recrearlo a través de la consciencia de la experiencia vital que deseas vivir y desplegar en el juego mágico de la vida. Lo mismo que separa, une. Y tu has nacido para brillar y aportar eso sólo de lo que sólo tu, eres bello portador.

CÓMO VIVIR AHORA

El ahora es el centro en el que expandes tu vida en cada momento. El único factor que permanece constante. Pasado y futuro, siempre han sido y serán un presente. Si miras a tu alrrededor, siempre existe el ahora. Sea de noche, de día, el ahora es el momento en el que resides. Para comenzar a recrear tu vida, tendrás que estar presente, hasta domar el piloto automático que crea por ti cuando no estás presente. A través del ahora, siendo y viviendo ahora, podrás empezar la página en blanco que en cada momento nace. Mediante la atención a estos elementos, que son los que continuamente generas, conseguirás vivir ahora :

Vibración. Nuestro estado de ánimo
Sonido. Las palabras (inbocaciones) internas y externas que nos escuchamos decir
Movimiento. Las acciones que emprendemos

En el camino del ahora abrazamos la antigua enseñanza esotérica del arte de la Alquimia: La transmutación de metales inferiores en oro, o de la inconsciencia de ti mismo en plena consciencia que elige que vivir y experimentar. Sanamos nuestro pasado abrazando las sombras de éste, esas partes que repudias de ti mismo y siempre quieres alejar de tu vista. Tratándolas como un niño o una niña pequeña que aún no era adulto/a cuando creaba, podemos integrar y transmutar en consciencia todo aquello que un día creamos sin ser plenamente conscientes de la vida que estando presentes o no, continuamente creamos y recreamos. Para sanar el pensamiento, el silencio es un gran aliado, escuchando esos pensamientos que podemos simbolizar como metales pasados y transmutándolos en oro refinado y consciente, empezamos a cambiar la percepción de nuestro presente y por lo tanto, nuestro futuro. Sanamos nuestra vida cuando la hacemos sagrada, cuando la reconocemos como un escenario abundante donde tenemos todo lo que necesitamos tener para desplegar la obra que queremos proyectar en el juego mágico de la vida. Todo lo que nace de ti vuelve a ti, es un acto de amor hacia ti mismo el asegurarte de que no creas algo que te destruya de vuelta.

EL TIEMPO CIRCULAR

Desde luego nuestra percepción del tiempo puede cambiar nuestra vida. Si cambiamos nuestra percepción del tiempo, cambiamos el ritmo y la percepción de nuestra propia vida. Lo que antes era prisa desmesurada, desasosiego y contínua lucha por llegar, acabar o terminar algo, ahora puede tranformarse en un eterno ahora donde todo tiene su momento. La física cuántica viene a redescubrir el tiempo, ese punto espacio-temporal que envuelve nuestra vida. Los conocimientos que arrojan no son tan avanzados como los de las culturas iniciáticas de hace más de 12000 años. Mayas, aztecas, qeros, incas fueron y algunos todavía son culturas tradicionalmente inclinadas hacia el conocimiento del cielo. De algún modo comprendiendo el cielo se entendían así mismos. De ahí viene su profundo conocimiento tan avanzado.

Actualmente entendemos el tiempo de forma lineal. Este tiempo maneja una única linea de dirección temporal, que va del pasado al presente y al futuro. Sin embargo no es la única y quizás tampoco la más adecuada a nuestros días donde se están produciendo grandes cambios de consciencia humana. La humanidad tiene grandes ciclos que se abren y cierran, y ahora el ser humano está despertando. Ahora es el momento de escoger una forma de percibir el tiempo que vaya acorde y a favor de nosotros mismos. Los Qeros y otras culturas nos enseñan el tiempo circular. Éste tiempo es una revolución constante en la que el tiempo es único. Es decir, siempre es aquí y ahora. Pasado, presente y futuro están aquí y ahora. No existe el segundo después, no existe el día de mañana, siempre es aquí y ahora. El tiempo así, no es una línea continua, si no una esfera por la que continuadamente nos recreamos. ¿Te parece extraño? Siempre experimentas este tiempo, ahora puedes ser consciente de él y aprovecharlo. ¡Bienvenido/a el ahora constante!

SABÍAS QUE…

Los indios Hopi vivián el ahora de una forma muy singular. En su vocabulario no existen términos que describan el tiempo (antes, despues, mañana, ayer, pasado..), en contraste utilizaban el tiempo a través de los ”Tunachés’‘. Un Tunaché era un deseo alcanzado que se legitimaba en otros para componer su tiempo. Así podemos formular la pregunta a un Indio Hopi de ‘¿Cuando vamos a la montaña?’ y que él nos respondiese ‘Dentro de tres tunachés’. De esta forma el tiempo era un gozo que se basaba en deseos a realizar que a la vez se sustentaban en otros ya realizados.

gallery maya biosphere reserve ruins

Los mayas tenían una forma maravillosa de crear su realidad a través del presente. Nos dicen que cuando nos planteamos un resultado de un suceso determinado, teníamos que obrar bajo el gran secreto para hacer funcionar la circunstancia a nuestro favor. Este secreto basaba en hacer dos lineas proféticas, es decir, una del resultado positivo y otra del resultado negativo. Cada línea profética describía plenamente cómo se desarrollaría cada una. Una era positiva y describía como se lograba tal resultado, y la otra era negativa y relataba como sería el procedimiento en ese caso. De esta forma, cuando se veían desorientados en su camino recurrían a estas dos líneas proféticas para saber en que punto estaban y hacia donde se dirigían. ¿En que línea profética estas hacia los resultados que esperas? ¿Estás en la linea que alcanza el resultado o en la que no?. Es una evaluación constante maravillosa.

CONSEJOS FINALES

La culpabilidad siempre se viste de pasado, la ansiedad siempre viste el traje del futuro. En el aquí y ahora encuentras la liberación de ambos y tomas las riendas de tu vida.
Tu vida, seas consciente o no, siempre la creas y la recreas en el ahora.
Estar anclados al aquí y ahora hace prácticamente imposible que seas víctima de programaciones negativas y vibraciones bajas. Empezarás a ser responsable de ti mismo en cada momento.
Para anclarte al ahora desarrolla la presencia corporal, el silencio interno y la ausencia de juicio.
Para cambiar tu vida comienza por vivir presente y ser consciente de dónde estás y hacia donde quieres ir.
Sustituye ¿que me falta para lograr eso? por ‘¿que me sobra para lograr eso?‘. El vaciarnos hace que nuevas circunstancias puedan ser recibidas.
‘Y en el principio era el verbo, y el verbo era con Dios, y el verbo era Dios ‘ Juan 1.1
Aprende a utilizar conscientemente cada palabra como cada pensamiento ya que ahora conoces su verdadero poder. Escúchate cuando hables y valora si tus palabras internas y externas se ajustan a aquello que quieres en tu vida.
Siempre has intuido que eras alguien especial. Has nacido para brillar y vivir tu propio sueño, no el de los demás.
Eres el Dios o la Diosa de tu propio Universo creando tu realidad en todo momento. Crea la experiencia vital que realmente deseas vivir a través de lo que piensas, sientes y manifiestas.
” Y el verbo se hizo carne…” Juan 1.14