Para superar el miedo debemos sustituir las creencias que lo potencian por creencias que lo disuelven. Es un cambio de enfoque. El objetivo no es luchar contra el miedo. No se puede luchar contra la oscuridad. Esa es una batalla que solo nos sumerge en una oscuridad mayor.
Nuestro foco de atención no debe ser hacia cómo superar el miedo, sino hacia cómo podemos ser más valientes.
Es decir, debemos adoptar creencias y actitudes que de una forma natural o reflexionada nos motiven a enfrentar nuestros miedos sin ese temor paralizante de las posibles consecuencias negativas. Creencias que nos hagan amar el reto y nos enfoquen en el disfrute de ese crecimiento, o incluso en esa actitud poética de disfrutar de nuestros tropiezos.
Deja de alimentar tu miedo y disfruta tu ahora
Solo has de pensar en una cosa: en dejar de alimentar tu miedo y DISFRUTAR. Cuanto más lo pienses y más suposiciones hagas sobre pasado y futuro, cuanto más sopeses las consecuencias y más lo calcules, más alimentas tu miedo.
El miedo es una energía que despierta ante ciertos estímulos de forma automática. Tiene razón de ser y es útil cuando los estímulos son racionales. Un león salta para intentar comerte, es lógico que salgas corriendo. Y entonces el miedo ahí te hará correr más rápido de lo que nunca habías pensado que podrías. Estás repleto de energía.
Valentía es canalizar ese energía hacia la luz. El valiente también se pone nervioso. ¡No pasa nada por estar nervioso! Los nervios nos vuelven más activos y perspicaces. Despiertan nuestras neuronas para dar su 100%. Es nuestro foco de atención el que dirige esa energía.
Dirígelo hacia el disfrute de tu ahora.
Dirige esas energías hacia lo que te hace actuar. Hacia lo positivo. Hacia lo que tu corazón te pide que hagas. El corazón es valiente. ¡Escúchalo a el! No importan las consecuencias. ¡Solo siéntete vivo!
Es sobre todo una actitud, la de ir hacia adelante valorando lo que se ama sin que nos detengan los temores.
14 creencias y actitudes para
ser valiente y disfrutar tu ahora
En mis cursos aprendamos lo que aprendamos intento enfocar esos aprendizajes desde el amor hacia el disfrute del ahora que permite que no solo consigamos vencer el miedo, sino que dejemos de pensar en el.
Por eso, ya sea para seducir como para mejorar en cualquier otro ámbito, promuevo la interiorización y práctica de estas 14 creencias que alimentan también todos los artículos de esta web empezando por dar nombre al blog: Be Brave.
Mi consejo es que reflexiones y medites sobre ellas. Contrástalas con tus pensamientos e inseguridades actuales e intenta ver todo lo que pueden aportarte. Enfoca todas aquellas situaciones que antes te daban miedo desde los razonamientos de estas 14 creencias sacadas de la filosofía del ahora. Medita sobre situaciones pasadas donde sentiste miedo, y obsérvalas desde fuera partiendo de estas premisas.
De este modo espero que consigas lo mismo que yo y muchos de mis alumnos: que ames tu presente, que te ames a ti, y que dejes de ser un «yo» para convertirte en este momento. Así es como cualquier miedo que tengas será vencido.
Haz que cada momento sea un fin en sí mismo
Ser valiente significa vivir la vida como si cada momento fuese un fin en sí mismo. Vivir en el aquí y el ahora. Es no olvidar el pasado, puesto que éste te aporta conocimientos y experiencias. No perder de vista el futuro, siendo honesto con tus objetivos, soñador y ambicioso. Pero no obstante, vivir la mayor parte del tiempo en el aquí y ahora, disfrutando de lo bueno he intentado disfrutar lo malo o aprovecharlo para sacar su parte positiva. No te reprimas ni te limites: Libérate de la vergüenza: Tu momento es ahora
Ama el riesgo
Ser valiente es no temer a nada ni a nadie, ni siquiera al miedo. Es amar el riesgo y entender que ésta es la única forma de sentirse realmente vivo. Y todo lo que te haga sentir, sea bueno o malo, te hace feliz. Lo disfrutarás, pues significará que estás vivo. Sal de tu zona de confort y supera tu miedo con: Supera tus miedos e inseguridades: ¡Fotalécete con su energía!
No esperes nada, prepárate para todo
Ser valiente es no esperar nada, pero estar preparado para todo. Es creer en uno mismo y en su capacidad para mejorar. Creer en estar preparado, pero saber que tu felicidad no depende de tus logros, sino acogerlos con sorpresa e ilusión, como un regalo. Sé más proactivo con: Preocupate menos y actúa más
Sé feliz incondicionalmente
Ser valiente es alimentar la actitud de vivir feliz incondicionalmente de los sucesos externos. Aunque la vida depende en gran parte de uno mismo y de sus actos, otra gran parte de ellos vienen del exterior y no se pueden controlar. Siempre que actúes como tú hayas querido no tendrás que sentirte frustrado aunque las cosas no hayan salido como desearas. Haz que el amor crezca en ti y nunca te abandone: Amor, una actitud que va por dentro
Sedúcete a ti mismo y a los demás
Ser valiente es seducirse a uno mismo para seducir a los demás y sentirse seducido por ellos. Para ganar-perder, o perder-perder se puede ser un cobarde. Solo los valientes buscan en ganar-ganar a toda costa. Haz sentir bien a los demás, ámalos y permíteles crecer contigo. Aprende a centrarte en lo positivo de ti y los otros: Elogia para seducir y enamorar: Cualificación amorosa
Sé psicológicamente libre
Ser valiente es no entender de prisiones, puesto que el ser humano ha nacido para ser libre y no para ser poseído. Ni siquiera por su propia mente. Es sentirte libre de ser natural y hacer lo que te dé la gana, incluso si contradice alguna de tus ideales. No buscar la perfección. Puedes liberarte de todo lo que te condicione. No existen mandamientos irrefutables en una vida siempre cambiante. ¿A qué esperas? Cultiva libertad en ti: Afronta el estrés emocional y libera tu creatividad
Ama lo desconocido
Ser valiente es amar lo desconocido y todo lo que no se puede controlar, pues te sientes inseguro dentro de ese terreno y esto hace que tu corazón lata más fuerte. Es tener un espíritu aventurero. Amar las emociones sean positivas o negativas y sentir amor en ti pase lo que pase sin caer en la trampa de la culpa.
Equilibra el control con el fluir
Ser valiente es combinar naturalidad y control, o la naturalidad innatural de Bruce Lee. Es entender que un exceso de naturalidad es imposible para vivir feliz en la sociedad controladora actual. Pero se es decidido a ser completamente natural y disfrutar intensamente de esos momentos únicos y meditativos, contemplando la seducción, el amor y el sexo como una gran afluente de estos momentos.
Aprende de los demás, pero sé tú mismo
Ser valiente es aprender de los demás sin buscar imitarlos. Ábrete a modelar aquello que deseas en ti, pero siempre bajo tu propia personalidad y estilo para hacerlo completamente tuyo. Toda nuestra vida es un fruto del modelaje, en la cual empezamos modelando a nuestros padres. Pero el valiente abre los ojos con conciencia para deshacerse de lo que no quiere y adoptar lo que si le potencia. Sé tu propio líder con: Condicionamientos: Toma el control de tus actos
Adáptate o sé rebelde
Ser valiente es ser capaz de adaptarse a cualquier entorno y al mismo tiempo ser rebelde con el si lo ves necesario. Es no quejarse ni hacerse la víctima o caer en el llanto tóxico, sino amoldarse o rebelarse. No actúes a la defensiva y caigas en las garras de la ansiedad. ¡Vé a por todas! Tú puedes si estás dispuesto a ello. Deja de agobiarte y poténciate para superar tu miedo con: Libérate de la ansiedad
Conócete y crece
Ser valiente es basarse en el ser para llegar a ser, con lo que requieres honestidad y sacrificio. No cree en el engaño a los demás ni a uno mismo, ni en aparentar lo que uno no es. Si algo de si mismo deja de gustarle, busca como cambiarlo y seguir creciendo de verdad, no dando imágenes falsas para contentar a otros. Empieza a desarrollar tu personalidad sin falsedades: Personalidad arrolladora: Desarrolla las habilidades del carisma
No te escondas
El valiente apuesta por el sacrificio, por mostrase desnudo. No tiene nada que esconder. No busca ser aceptado. Está por encima de la opinión de los demás porque se ama y cambia libremente bajo su propio dictamen, no por lo que otros digan. Siempre hay detractores y seguidores, no importa. La sensación de ser tu es lo verdaderamente relevante. Ya te defenderás si toca y te apetece hacerlo. Empieza a aceptarte más sin depender de la opinión de los demás en: Aceptación: Ámate y potencia tu autoestima
Genera emociones positivas
Ser valiente es creer que el mayor poder de seducción está en ser feliz y en contagiar esa felicidad a los que le rodean. Admirar y respetar a hombres y mujeres, y convertir la felicidad de tus semejantes en tu mayor poder de seducción. Ama con intensidad y trata a tus amantes con respeto, cortesía y erotismo. Seduce generando emociones positivas con: Seducir para generar una conexión intensa
Juega, arriesga, diviértete
Ser valiente es creer que la vida es de los jugadores, para los que arriesgan. Se puede ser más exitoso o menos, tener la cuenta bancaria a rebosar o con números rojos parpadeantes. Pero ya seas el más exitoso, famoso y rico del mundo, ¿de qué sirve todo eso si no te diviertes y gozas de una vida plena y feliz? Ser valiente es jugar, jugar y jugar.
La vida es danza. Es apreciación de belleza. Solo el cobarde se esconde buscando seguridad o se hace el mártir. Nada puede detenerte, ni limitarte, ni debilitarte, ni condicionarte si tu no lo permites.
Eso es ser valiente.
Utiliza las creencias para incrementar tu atractivo
Estas creencias no solo nos ayudan a superar el miedo y ser más valientes, también nos hacen ser vistos de otra forma desde las miradas externas. Influyen en nuestros actos, actitudes y en todo lo que comunicamos.
Son una filosofía de vida.
Como vimos en mi Guía El don de la labia, nuestra filosofía de vida nos da mucha conversación sobre quienes realmente somos y en qué creemos. Por eso no te olvides de reflexionar sobre aquello en lo que crees para así poder decírselo al mundo, y dicho sea de paso, que te lo puedas recordar a ti mismo. Así podrás aumentar el atractivo de tu personalidad y comunicar de una forma más emocional.
#wearebrave #alwaysbeatyourself
Vive desde el amor y ningún golpe conseguirá escapar de tu aceptación y comprensión. No habrá nada que no puedas aguantar, pues estarás tan embelesado por la vida y sentirás tanto el presente, que los golpes pasarán más rápido de lo que te de tiempo a asimilarlos.