La creatividad es una habilidad que todas las personas podemos entrenar y desarrollar. Se dice de las personas creativas que tienen un don, chispa, encanto, inteligencia… A menudo parece que hablamos de personas divinas, que han sido tocadas con una varita mágica para que el mundo alabe lo molonas que son.

Lo cierto es que la creatividad se puede potenciar, tanto en habilidades como en actitudes. Existen explicaciones psicológicas para justificar que una persona sea más o menos creativa. De hecho, todos hemos oído hablar o estado con personas que han sufrido de «pérdidas de inspiración». Artistas de la canción que dejaron de componer durante un tiempo, escritores y poetas que no encontraban su musa, y un largo etcétera.

Todos pasamos por diversas etapas en nuestras vidas donde los estados emocionales suben y bajan, cambian de color, se vuelven suaves o ásperos, e infinidad de cambios más. Es decir, hay veces que somos más creativos y otras menos.

Por tanto, si no encuentras tu creatividad por ninguna parte, no te preocupes. Deja de buscarla en los cajones, y empieza a llamarla con tus acciones.

Veamos pues, en palabras de Joy  Paul Guilford y De los Ángeles, dos reputados expertos sobre la creatividad, las características que debes desarrollar para potenciar tu creatividad, y para las que acompaño unas pequeñas reflexiones propias a cada una de ellas.

1. Sabiduría

Predisposición por acumular saberes, interés por aprender, capacidad de observación y de reflexionar.

Muchos autores y teorías defienden como la creatividad parte de una asociación entre distintos conocimientos que ya poseemos, y que unidos forman algo nuevo. Sabemos que existe el pan, sabemos que existe la pizza, ¿y si inventamos un pan pizza? Sabemos que existe el caramelo, y sabemos que existen los palos (palos de madera o cualquier otro material, no los que te daba tu madre cuando te portabas mal), así que inventamos el Chupa Chups.

Como ves, la sabiduría sirve para algo más que para dejarse barba cuando somos viejecitos y que nos señalen diciendo que somos sabios. ¿Cuántos no se han hecho multimillonarios gracias a la creatividad? ¿cuántos no se han hinchado a ligar con su desbordante labia creativa?.

¿Un consejo? Comienza a leer más todos los días al menos media hora, y aquello que leas intenta trasladarlo a otras áreas de interés. Busca las asociaciones que el conocimiento nos brinda. Fomentará tu inteligencia y se te ocurrirán grandes cosas que no habrías creído que salieran de tu cabecita. Y si te haces rico ya sabes, te paso mi número de cuenta y me lo agradeces como se merece. Viajar, conocer gente nueva, y observar lo que nos rodea cada día, también son grandes fuentes de sabiduría.

2. Flexibilidad y crítica

Capacidad de adaptarse a las circunstancias nuevas, mentalidad abierta, saber escuchar y habilidad para detectar el problema y aplicar los datos para su resolución.

La vida es flexible y amplia en visiones e interpretaciones, y así es como debemos verla si algún día queremos llegar a entenderla.

Desde la sociedad nos vienen ideas preestablecidas que chocan violentamente contra un principio clave de la vida, y es que la vida está en contínuo cambio. Es como un río en movimiento. Como la propia naturaleza que hoy nos da un día soleado y mañana nos lo presenta nublado.

Aquellas personas que no pueden deshacerse de creencias e ideas fijas, algunas incluso se las tatúan en la piel para toda la vida, difícilmente pueden ser creativas. Serán lentas y patosas, las llevarán atadas a los pies como una gran roca, pues cualquier idea por cierta que sea, puede caerse, puede ser falsa, puede ser reversible. Lo que hoy es, mañana no sirve.

Acepta, pues, que en la vida no hay nada permanente. Acepta que no hay nada rígido y perfectamente estructurado, pues la vida misma no es así, y si así fuera sería tremendamente aburrida.

3. Originalidad

Facilidad para ser distintos (lateral, divergente) y disposición para ver las cosas de manera diferente.

Para Koestler, en lo referente al pensamiento divergente, supone un estado donde fluyen las ideas libremente y el razonamiento lógico y disciplinario queda en suspenso.

La respuesta obvia y racional no siempre es la que obtiene buenos resultados. ¡Cuántas veces hemos oído a emprendedores decir que nadie creía en sus ideas y al final funcionaron!

Dicen por ahí que todos los caminos llevan a Roma. Yo digo que a cada momento de nuestra existencia, esa camino que nos lleva a Roma está cambiando, y que hay veces que en lugar de ir en coche, la forma más rápida de llegar es en barca voladora.

Hay que pensar en diferentes direcciones y soluciones a los problemas que se nos presentan aunque al principio no parezcan lógicos. Romper nuestras barreras sobre lo que creemos es cierto, y lo que creemos que no lo es, y empezar a mirar desde muchas perspectivas diferentes. Eso sí… ¡sin volvernos locos!

4. Iniciativa

Talante optimista y positivo, confianza y capacidad de decisión para asumir riesgos.

Recuerdo cómo en mi libro de Estrategias de Marketing decía que estaba demostrado en diversos estudios que aquellas empresas cuya dirección tenía aversión al riesgo (miedo al riesgo), pregunta que además cayó de pleno en el examen, eran poco creativas. Esa aversión al riesgo ha llevado a muchas empresas a no lanzar nuevos productos por miedo a fracasar y perder la inversión, y a su vez estancarse en el pasado y la mediocridad, a su extinción.

Es de lógica pensar que si eres miedoso/a, no tienes confianza en ti mismo/a, no vas a probar cosas nuevas. Te quedarás en tu zona de confort, en aquello que conoces, y en conclusión, no verás los distintos caminos hacia Roma. Sólo verás uno, y posiblemente en lugar de a Roma te lleve a Sidi Bou Said (Túnez). Y tú quieres ir a Roma. ¿A donde queremos ir? ¡A Roma! Que quede claro. Así que ya sabes, a echarle huevos (u ovarios).

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5. Organización y elaboración

Establecimiento del orden de actuación y articulación de una estructura a tenor de la información.

Me encantan los locos creativos. Para mí, los locos creativos son aquellas personas que viven contínuamente en el famoso brainstorming que inventó nuestro colega Osborn. A veces son más conocidos en España como los «fumaos».

Los fumaos son esas personas que siempre tienen inmensidad de ideas. Una lluvia mental en su cabeza, de ahí lo de brainstorming (lluvia de ideas), pero rara vez las ordenan y sacan algo en claro de ellas. Son perfectos soñadores y altamente creativos, pero sin una estrategia y un plan organizado para trasladar toda esa energía hacia un fin concreto, al final todas esas ideas acaban en el limbo. Lo cual tampoco está mal, soñar es muy bonito, pero ya que se tiene esa capacidad, mejor aprender a sacarle partido.

6. Sensibilidad

Capacidad para captar los problemas, apertura frente al entorno, cualidad perspectiva que focaliza la atención y el interés sobre un problema.

Tenemos que observar y estar abiertos y flexibles a lo que nos rodea. La creatividad está ahí afuera, y como decía Miguel Ángel, él no tallaba la escultura, simplemente la descubría eliminando la piedra sobrante.

Las ideas creativas flotan en el aire esperando ser recogidas por un buen observador. Así es como surge la mayoría del conocimiento y esa sabiduría de hombre de barba blanca.

7. Trabajo

Capacidad aplicada a la consecución de un fin propuesto con constancia, determinación y esfuerzo.

No me enrollo aquí. Paso. Creo que todos sabemos que sin curro, no hay victoria. Si no se está dispuesto a trabajar con entusiasmo y dedicarle horas y horas a las cosas. Así como a aguantar los golpes, frustraciones y fracasos que puedan venir, la creatividad muere en la visualización.

Como decía Pablo Picasso, la inspiración existe, pero tiene que encontrarte trabajando.

8. Redefinición

Capacidad de reacomodar conceptos y problemas transponiendo sus funciones. Entender un problema de un modo diferente para darle una solución original.

Todas las cosas de la vida tienen blancos, negros y grises. Pueden ser buenas, malas, o más buenas o menos malas. Las percepciones que cada persona tiene son únicas e intransferibles, y al mismo tiempo cambiantes a cada segundo.

Para ser creativos necesitamos tener capacidad de reflexión. Tener la capacidad de desglosar algo en mucho trocitos, y también de resumir algo extenso en algo corto. Pero sobre todo tenemos que enlazar los distintos hilos de conocimiento. Lo que sirve para una cosa, sirve para otra completamente diferente. Siempre estamos en un bloque de redefinición de estímulos.

Reflexión final

La creatividad comienza con nuestra capacidad de soñar y deslumbrar algo novedoso. Sueña con algo nuevo y grande para ti. Algo que te entusiasme. Puede que sea algo interno, una mejora personal en algún aspecto. O algo externo relacionado con algún objetivo que deseas conseguir.

Pero nunca olvides darle la vuelta a las cosas, intentar visualizarlas desde otra perspectiva.

Si hubiera hecho lo que la gente me demandaba y hubiera hecho caso de lo que me decían que necesitaban, no hubiera diseñado un coche sino un caballo más rápido.
Henry Ford

#wearebrave #alwaysbeatyourself

Sumérgete en tus sueños y visualízalos a tu gusto. Píntalos de distintos colores, desde varios ángulos y perspectivas. Después reflexiona sobre distintos caminos para conseguir lo que quieres. Crea un plan de acción que puedas modificar y variar a tu gusto a lo largo del camino. Entonces, ponte en marcha y cúmplelo con energía. ¡Así es como los sueños se vuelven realidad!

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