La motivación según la RAE es un ensayo mental preparatorio de una acción para animar o animarse a ejecutarla con interés y diligencia. Pero, ¿cómo motivarse para conseguir lo que queremos? Quizá esa sea la pregunta a la que más nos interese dar respuesta.
Hoy vamos a hablar sobre la motivación desde la perspectiva del éxito, ya que al fin y al cabo, la motivación nace de ese deseo de éxito que volcamos hacia nuestras metas.
El éxito es algo personal
Antes de motivarte a conseguir éxito, reflexiona qué éxitos quieres
Los patrones que marcan qué es o no es éxito no son los mismos para todas las personas. Nunca nadie olvidará jamás a Mahatma Gandhi. La huella que ha dejado en nuestro querido planeta muy difícilmente podrá ser borrada. Sin embargo, cuando abandonó este mundo estos fueron los objetos que nos dejó en herencia:
Este es un claro ejemplo de que la vara de medir del éxito no está fabricada en dólares. Por desgracia en las sociedades actuales uno de los comentarios más habituales cuando uno se encuentra motivado hacia unos objetivos suele ser: ya… todo eso está muy bien, ¿pero se hace pasta?.
¿Cómo evaluamos el éxito en la sociedad?
Preguntas externas:
- ¿Qué es el éxito para los demás?
- ¿Cómo puede ser percibido como una persona exitosa?
- ¿Qué necesito conseguir para ser considerado una persona de éxito?
- ¿Cuánto dinero o qué posesiones materiales hacen falta para que vean que soy exitoso?
Esta clase de preguntas nos enfocan hacia cumplir objetivos socialmente valiosos. Se podría decir que sus respuestas van encaminadas a situaciones o hechos más tangibles y evaluables por el resto de la sociedad.
Perguntas internas:
- ¿Qué es el éxito para mí?
- ¿Cómo puedo considerarme a mí mismo como exitoso?
- ¿Qué metas he de cumplir para sentir que he tenido éxito en mi vida?
- ¿Qué huella he dejado en el mundo tras mi paso por él?
Las preguntas internas nos enfocan hacia un éxito diferente, independientemente de lo que otras personas consideren como éxito, y se basan en nuestra propia percepción sobre lo que para nosotros es el éxito, aquellas que nos dicta nuestro corazón. El éxito es algo individual.
Evita caer en la frustración que esconde el éxito
El éxito 100% en todas nuestras acciones es imposible. Únicamente podemos medir el éxito en términos de promedios.
Un artesano puede ser considerada una persona de gran éxito por su habilidad, pese a que no vaya a amasar grandes fortunas. Puede hacer de su trabajo todo un arte. Pero pese a que sea un artista en su oficio, siempre obtendrá resultados que sean mejores o peores que otros. Más o menos aceptados.
El artista que se propone la perfección en todo no la consigue en nada.
Eugène Delacroix
Una sola palabra puede hacer que un libro quede mejor. Quizá en un porcentaje muy pequeño, casi inapreciable, pero siempre se puede mejorar. Y eso es maravilloso. La carretera de la vida nunca acaba y nos puede llevar cada vez más arriba y que nuestra motivación siempre vaya renovando. Aquellos que intentan ser perfectos a menudo lo utilizan como excusa para quedarse de brazos cruzados.
Libérate de la presión del miedo y lucha por tus ideas. Puedes salir reforzado de los fracasos, pues alcanzarás con ellos un gran aprendizaje.
Todos tenemos derecho a equivocarnos y a que las cosas nos salgan mal, si siempre fuésemos perfectos no aburriríamos. Tenemos que amar el riesgo y la creatividad de hacer algo nuevo pese a que nos arriesguemos a que no guste. Como siempre se dice, quien no arriesga, no gana. Y el riesgo tiene dos caras ocultas, una es la del gran éxito, y otra la del gran fracaso, lo mejor de todo es que de ambas caras aprendemos.
Sin esfuerzo no hay satisfacción, pero cuidado…
Las personas valoramos más aquellas cosas que consideramos que tienen un coste. Cuando sabemos que el fruto que recogemos es el resultado de poner nuestra habilidades y sacrificios en juego.
No obstante la satisfacción gracias al esfuerzo también implica otro coste. Y es que si solo nos concentramos en conseguir y en valorar aquellas cosas que nos cuestan un esfuerzo, podemos caer en el error de ser incapaces de valorar lo que ya tenemos a nuestra disposición. ¿De qué serviría luchar por los éxitos si luego somos incapaces de disfrutarlos?
Pocas veces pensamos en lo que tenemos pero siempre en lo que nos falta (Schopenhauer)
Hazte ya con mis libros:
Cómo motivarse para conseguir tus éxitos
Revisa tus fuentes de motivación
A lo largo de mi carrera estudiantil, debido a mis estudios de Marketing y Administración de empresas, he leído mucho sobre casos de éxito en las compañías más relevantes.
Si algo me ha quedado claro, es que aquellos que basan su vida únicamente en ganar más y más dinero, aunque consigan amasar una buena cantidad, no suelen pasar de la mediocridad. O peor, no sobreviven en el tiempo.
Dicho de otra forma: no dejan huella. Para motivarse para conseguir el éxito, debemos pensar en algo más que en el dinero o el tan anhelado reconocimiento social.
Supera los límites del dinero
Si hay una experiencia que puedo recalcar en mi vida, sin duda es la de mi experiencia como escritor y coach. Llevo escribiendo y compartiendo contenido gratuito en las redes sociales y en mi blog desde el año 2012. Y aunque si es cierto que he tenido ingresos como coach, te puedo asegurar que el dinero no es lo que más me motiva a hacerlo.
Personas que han alcanzado gran éxito raras veces han estado motivadas por el dinero en primer lugar. ¿Algunos de ellos se han hecho millonarios? Sí. Pero normalmente esa ha sido la consecuencia de llevar a cabo sus pasiones.
Durante estos años he recibido muchos mensajes. Como este sobre uno de mis artículo en el que hablo sobre la aceptación: Te agradezco mil este artículo. Ha cambiado casi por completo mi vida y mi nivel de felicidad, yo tenía un serio problema de aceptación. No hacía más que repetirme que estaba todo bien por muy mal que me fueran las cosas o las hiciera, causándome un gran estrés interno y nerviosismo permanente por disonancias cognitivas. Gracias mil de nuevo.
Recibir mensajes de agradecimiento cada día es lo que más me ha movido siempre. Pero no hace falta ser escritor, médico, psicólogo, o coach para sentir esto. En cualquier trabajo se puede realizar un gran servicio que aporte calidad de vida a otras personas.
La finalidad de las acciones es lo que más motiva
El dinero puede ser una fuente de motivación, pues todos tenemos que asegurarnos nuestra supervivencia. Todos queremos vivir bien. Pero no es la única.
Existe una motivación mucho más potente que consiste en ver cuánto podemos aportar a mejorar el mundo y cuánto podemos llegar a disfrutar de la vida mientras lo hacemos. Esa es la motivación de una persona como Mahatma Gandhi. Y es una motivación que podemos encontrar en cualquier parte…
Una madre puede intentar aprender a educar mejor a sus hijos, y gracias a su esfuerzo construir un mundo mejor. Esa puede ser su fuente de motivación para no caer en las garras de la monotonía y el aburrimiento.
Motívate cada día gracias a tu capacidad de soñar. Sumérgete en tus deseos más reales y profundos, e imagina que haces algo que aporta utilidad a tu vida y a las vidas de otras personas. Así nunca te faltará una buena dosis de energía de la que echar mano.
#wearebrave
Y ahora yo te pregunto, ¿y tú que puedes hacer para mejorar tu vida y la de otras personas? ¿Qué fuentes de motivación tienes a tu disposición? ¿Las estás valorando?
Da respuesta a esta preguntas. Construye una serie de objetivos, y siempre contarás con una ilusión latente en ti que te anime a sacarle el máximo provecho a tu vida. Hazte estas preguntas en tu trabajo, cuando trates con tu familia. ¡En todo! Busca esa finalidad superior que te ayudará a ser mejor y a motivarte para ello.
Sé un visionario
Dicen que el último gran visionario empresarial fue Steve Jobs. Su ilusión consistía en alcanzar la perfección y la excelencia en los productos que su empresa fabricara, pues es bien sabido que poco inventaron. Su objetivo era innovar en lo que ya había para hacerlo excelente.
¿Podemos considerar que Steve Jobs cambió muchas vidas? Nunca sabemos si para mejor o para peor, pues al igual que pudo facilitar nuestras vidas con un iPhone, sin duda también ha podido crear una adicción que nos genera estrés. Pero indudablemente, consiguió algo grande que ahora casi todos valoramos.
Tus sueños darán alas a tus acciones para que todos los cambios que quieras hacer en tu vida se produzcan.
Siente motivación hacia las cosas sencillas
No hace falta inventar el iPhone para sentir que aportamos algo a este mundo. Una ama (o amo) de casa puede ser muy creativa y vivir entusiasmada por hacer de su hogar un sitio único. Tengo una amiga que se llama Nahir, que trabaja en un centro de belleza, y pasar por su casa es toda una experiencia que merece la pena repetir y disfrutar. Se preocupa de cuidar los detalles para que todos consigamos desconectar por completo del mundo. Velas perfumadas, música relajante, comida sabrosa, y si es posible, móviles desconectados.
Nací para ser un vagabundo. Era más feliz cuando no tenía nada. Entonces tenía una gabardina con los bolsillos grandes. Llevaba en ellos un par de calcetines, una edición abreviada de Shakespeare y una botella de whisky. Era feliz, no quería nada y no tenía responsabilidades.
William Faulkner, ganador del premio Nobel.
No nos hace falta irnos muy lejos para aprender de las personas. Tengo otro amigo que su mayor motivación es sencillamente disfrutar todo lo que pueda de cada momento y de las personas a las que quiere. Si tuviese que crearle un mensaje publicitario creo que sería algo así: «Con un Gin Tonic en la mano y la sonrisa de mis amigos, soy feliz, y no precisamente en ese orden».
La vida se exprime y se bebe disfrutando cada una de sus gotas. Las pequeñas cosas aportan una felicidad infinita si podemos verlas y sentirlas con claridad.
#wearebrave
Sueños y deseos que llenan de plenitud nuestro día, bienvenidos. Pero bienvenidos también los pequeños y simples placeres que nos aportan cada latido de nuestro existir. Porque hoy son gratis, pero mañana pueden no seguir ahí. Siendo ahora el momento de disfrutar y sentir lo que la vida nos da.
Conviértete en tu propia referencia a superar
Aquellos que más crecen y progresan en la vida no son los que se fijan en ser mejores que los demás, sino los que se fijan en ser cada día mejores que ellos mismos.
Empresas de gran éxito y liderazgo como Intel tienen el enfoque de que sus nuevos productos dejen obsoletos a sus productos anteriores. Se consideran a ellas mismas como su máximo competidor, y su objetivo es superarse cada vez más. Solo así consiguen mantener su posición de liderazgo sin caer en la complacencia del éxito que les haría ser superados por los rivales.
Deja de fijarte en los demás y tómate a ti mismo/a como referente a superar. Día a día y paso a paso, con ilusión y entusiasmo, superando tus propias fortalezas y debilidades internas. Así tus sueños, éxitos o deseos pasarán de ser anhelos buscados, a consecuencias encontradas.
Todo está en tus manos: sueña, aprende, vive y actúa. Eso es cambio.
Los cambios acompañan cambios en las metas, objetivos e ilusiones, y en cómo podemos conseguir lo que nos propongamos.
Un nuevo trabajo, un nuevo proyecto, una mejora personal. Hacen que nos imaginemos luchando o cumpliendo dichas metas. Entonces el entusiasmo y la motivación se renuevan porque tienes un nuevo camino que recorrer. Algo nuevo por lo que vivir.
De ahí que esos malos momentos por los que podamos pasar deban ser momentos de reflexión que nos lleven a nuevos objetivos personales o profesionales. O simplemente seguir con lo que hacemos pero ilusionarnos por hacerlo mejor.
A veces tendemos a juzgar y juzgarnos al mismo tiempo que buscamos toda clase de excusas para justificar que no estemos donde deseamos.
Gandhi dijo: Sé tú el cambio que quieres ver en el mundo.
Es muy fácil quejarse de que nuestra vida no sea nuestro ideal soñado. Es muy fácil buscar y analizar toda clase de factores externos o echar la culpa a otras personas de nuestros fracasos.
Encontramos un problema y nos ponemos las gafas de la infelicidad. Ya solo podemos ver la vida a través del reflejo de ese problema. Y así podemos pasar años y años, siendo infelices porque nuestra ceguera nos impide mirar más allá, hacia la inmensa belleza que rodea nuestras vidas.
Carecer de un objetivo es el peor enemigo del éxito.
Visualiza el cambio. Recuerda aquellos sueños que dejaste atrás o vuelve a crear nuevos. Nuevos sueños y objetivos que desees tanto personales como profesionales. Imagínate cargado de alegría cumpliéndolos.
Tus sueños darás alas a tus acciones para que todos los cambios que quieras hacer en tu vida se produzcan. Todo está en tus manos: sueña, aprende, vive y actúa. ¡Eso es cambio!
Más en mi artículo:
Cómo tener éxito duradero: 11 secretos para triunfar
Meditación para alcanzar el éxito
Prueba mi audio de meditación que te ayudará a motivarte para que consigas tus metas. Resiste las dificultades, baja el volumen de los problemas, y obtén la energía y constancia que necesitas para hacer tus sueños realidad.
#wearebrave #alwaysbeatyourself
Lo importante no es lanzarse a la búsqueda de un nuevo cambio. Lo importante es no dejar nunca de aprender y soñar. Préstate a proteger tus ilusiones imaginando lo mucho que puedes hacer y conseguir. Eso dará alas a tus acciones para que todos los cambios que desees o necesites hacer en tu vida se produzcan por mera atracción. Todo está en tus manos: sueña, aprende, vive y actúa. ¡Eso es cambio! El cambio procede del entusiasmo que nos mantiene en movimiento…